“Al carajo la posibilidad de una reforma agraria”

Wilmar Jaramillo Velásquez

El único responsable que la propuesta bandera de su gobierno se fuera al carajo, es el mismo Gustavo Petro, por duro que suene.

Por: Wilmar Jaramillo Velásquez

El título del libro de Gerardo Vega, “Los Fracasos de la Reforma Agraria, Tierras nuevas, trucos viejos” lo dice todo y de paso le deja a uno esa sensación de frustración que ha vivido el hombre del campo colombiano en las últimas seis décadas.

Y cuando digo que el único responsable de esa nueva frustración es el propio gestor de la reforma agraria, su impulsor, el mismo presidente Petro, es porque  él es el jefe del gobierno, por quien votamos los colombianos, es el gerente de nuestro estado, entonces  no hay que buscar chivos expiatorios en dos burócratas e  inútiles ministras carcomidas  por sus egos  e incrustadas  en las burbujas propias en las que se ocultan los funcionarios capitalinos, arropados en un centralismo que no  pudimos  derrotar ni con la Constitución del 91.

Una ministra tan digna y tan socialdemócrata, hecha y dispuesta por el viejo y caduco establecimiento para “proteger la sagrada propiedad privada” y donde todo le huele a expropiación e ilegalidad. La otra, una burócrata de profesión, más interesada en no hacer nada ni dejar hacer, enfermiza en protegerse del mismo estado al que supuestamente le sirve y por lo que le pagan,

Como al pastel le faltaba la cereza, entonces había que nombrar en la Agencia Nacional de Tierras al señor Felipe Harman, cobijado por un amplio prontuario, 38 investigaciones en su contra, donde se incluyen perlas como acoso sexual, extorsión y celebración indebida de contratos, haciendo claridad que son sindicaciones. Lo nombra en el cargo para que concluya el entierro de tercera a la cacareada reforma agraria.

Sin embargo, la nueva ministra (tercera en dos años) Martha Viviana Carvajalino Villegas, experta jurídica, tiene menos de dos años, incluyendo el año electoral para rescatar del ahogado el sombrero, si la dejan y aguanta el trote y poder subir las enclenques cifras en la compra y entrega de tierras.

Tiene en su contra que encuentra unas oficinas desmanteladas, falta de compromiso de los funcionarios, desgano total en las regionales y un retroceso pleno en todos los procesos en que había avanzado la ANT.

En el pulso entre la ministra Jhenifer Mojica y el director de la ANT, Petro le dio la espalda a Gerardo Vega, a quien conocía justamente por su amplia experiencia en temas de tierras, a quien incluso varios analistas y medios serios como Portafolio daban como ministro de agricultura.

El libro de Gerardo Vega, entre muchas otras perlas revela lo retorcido de Juan Manuel Santos y el conejo que le hizo a los firmantes de paz desde varias direcciones; que se puede negociar con altura y dignidad con los grandes potentados del país así, estos estén en la orilla más lejana del gobierno y sus postulados.

El libro también deja al descubierto algo que ya sabíamos, pero reforzado con cifras, el triunfo de Iván Duque en volver trizas la paz y los acuerdos con desmovilizados. ¡Qué éxito!

Igualmente corrobora y comprueba la vieja máxima que el estado está hecho para que no funcione, se mueve en una maraña de inútiles dedicados a esgrimir normas y leyes en las que se amparan para no hacer nada distinto a cobrar sus jugosos sueldos y privilegios.

Nos muestra claramente como se roban el país hasta los más notables ciudadanos, como el caso de Islas del Rosario con funcionarios descompuestos amparando y acolitan estas acciones criminales.

Finalmente, y como síntesis, algo muy doloroso, Petro se rompe el lomo consiguiendo la plata para la tan anhelada y aplazada reforma agraria y termina enredado y frustrado al lado de quienes creía sus aliados. Hoy dicha reforma es un fracaso, las metas jamás se cumplirán y los recursos quedarán en una fiducia para que un nuevo gobierno los reparta entre sus socios como lo han venido haciendo hace más de medio siglo.

Muy seguro también los predios recuperados por Gerardo Vega en Islas del Rosario irán volviendo poco a poco a sus viejos usurpadores bajo la mirada cómplice de funcionarios delincuentes que no son pocos.

También queda una propuesta interesante en el tintero como sacar la ANT del Ministerio de Agricultura, darle dientes, ponerla a volar y acabar con los celos y las vendettas al interior de la misma institucionalidad, esto lo hará un gobierno con pantalones, pero sobre todo con voluntad política.

Finalmente pude comprobar como desde el Ministerio de Agricultura y la misma ATN, armaron un dossier contra Gerardo Vega y lo enviaron soterradamente a los medios de comunicación más representativos del país para condenarlo públicamente durante un fin de semana. Los enemigos no son el uribismo como dicen en las redes sociales están ahí al lado de Petro. (Esto no está en el libro, es otra realidad)

Le abono al exdirector de la ATN, a quien conozco hace 25 años, el valor civil para encarar la vileza en su contra, su disposición para ponerse a órdenes de las autoridades competentes cuando lo requieran y la forma clara y precisa como narra toda esta historia, incluyendo apartes muy positivos en la compra y entrega de predios a los campesinos, tampoco será ni la primera ni la última vez que lo persiguen eso ya es costumbre.

Es importante observar el daño que hace la Gestapo amenazando y hostigando a toda hora a los funcionarios del gobierno lo que termina sembrando miedo y limitándolos a la hora de actuar. (Claridad que dicha Gestapo, son rezagos vengativos del gobierno de Duque)

Urabá-Antioquia-agosto-11/2024.